Hoy tengo el placer de presentaros a otro gran amigo mío que ha decidido colaborar con este pequeño blog para que podáis tener otras perspectivas distintas del mundo del futbol americano, que yo creo que es interesante ver a traves de otros ojos la manera de ver este deporte que nos apasiona a todos. El se llama Iñigo, pero podéis llamarle Jau, que estamos entre amigos.
Un aplauso: (¡RABO! ¡RAAABOOO!)
Espero que os guste. A mi, me ha encantado.
“Eso no es un deporte, es una salvajada”, “...no es mas que una copia violenta y aburrida del rugby…” o “…es inaguantable un partido de tres horas y media si paran cada minuto…” son algunas de las perlas que he oído a la gente a mi alrededor cuando se a ciencia cierta que no han visto un partido completo en su vida.
Es cierto y por tanto no voy a negarlo que es un deporte complejo, difícil de comprender en profundidad y con infinidad de normas que cuesta asimilar. Es cierto también que es un deporte totalmente ajeno a nosotros, puesto que no podemos encontrarlo cada día en las portadas de los periódicos ni en los informativos televisivos. Es cierto además, que no es un deporte fácil para practicar de manera amateur, puesto que el equipamiento necesario es caro y difícil de encontrar a este lado del atlántico. “Es cierto que…..…”y así podría continuar toda la noche poniendo pegas para que no te guste este deporte, pero aún mas cierto que todo lo que he escrito arriba es que es un deporte fantástico, cargado de momentos espectaculares y que es capaz de quitar la respiración en muchos de ellos.
El caso mas claro son esos tres o quizás cuatro segundos en que el balón sobrevuela las cabezas de todos los jugadores tras salir despedido de la mano del quarterback para cruzar medio campo y llegar a las manos de su receptor. Esos instantes pueden hacerse eternos, notas que tu corazón esta en un puño, da igual que sea tu equipo o el contrario el que ataque, simplemente desearas una cosa u otra, pero esos instantes… esos instantes son mágicos, la ves volar y…creo q hay que probarlo para entenderlo.
Pero no es lo único fantástico de este deporte, el hecho de saber que hay en todo momento en el campo veintidós hombres dispuestos a dar su alma y su salud por conseguir ganar el partido es algo increíble. Simultáneamente se libran varias batallas en diferentes frentes.
En ataque hay como mínimo cinco hombres cuyo único fin en una jugada de pase es conseguir mantener a salvo durante unos instantes al QB para que consiga realizar el pase, mientras otros tantos en defensa tienen como único objetivo golpearlo, cuanto mas fuerte mejor, para que no consiga hacerlo. Mientras esto esta ocurriendo, los receptores, tight ends y probablemente también los runningbacks estarán intentando conseguir un mínimo espacio de separación entre ellos y sus defensores para que el quarterback consiga realizar el tan ansiado pase.
Y luego esta el solitario quarterback, solo ante el peligro, el hombre por el que todos dan su vida, al que todos intentan proteger y que si no consigue su objetivo o comete un error todos los ojos acusadores miran. Es el foco de todas las críticas en caso de derrota y de todos los halagos en caso de victoria. Es el héroe y el villano, y por eso no es un puesto para el que valga cualquiera.
Pero es que además a los lados del campo se libra la batalla más importante, donde se mueven los hilos para que todo este tinglado funcione correctamente. Es aquí donde se crea la magia, donde se elige cada jugada meticulosamente para intentar engañar al equipo rival. Son los entrenadores, los jugadores del ajedrez más espectacular del mundo.
Por todo esto, y por mucho mas es por lo que este deporte es tan especial. Esto es football.
Buen clima.
Jau.
ya sabemos pork jau no a ido oy a la uni.....ajjajaj
ResponderEliminarMe lo mandó ayer!Así que esa no es excusa!Pero tenía que poner antes lo del flag football!que me lo pidieron como un favor!
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